Un bioimplante para reparar corazones infartados

El grupo de Biomecánica Celular y Respiratoria del IBEC ha contribuido a una operación pionera en el mundo que ha permitido regenerar el tejido cardíaco de un paciente tras un infarto. Esto ha sido posible mediante la creación de un bioimplante en colaboración con el Banco de Sangre y Tejidos (BST) y el grupo de investigación en Enfermedades Cardiovasculares (ICREC) de Germans Trias.
Cuando se produce un infarto de miocardio, el corazón pierde fuerza para latir a causa de la muerte de las células del área lesionada, que han dejado de recibir sangre desde las arterias coronarias. Este hecho, en función de la gravedad, puede condicionar la capacidad para llevar a cabo actividades de la vida diaria, así como la calidad y la esperanza de vida.